lunes, 17 de abril de 2017

MUFFINS DE CALABACÍN Y ZANAHORIA



Hace unos días mis padres nos trajeron a casa una caja enorme llena de calabacines hermosos, así que estoy buscando la forma de comerlos de distintas formas, sin aburrirme en el intento. Estos originales muffins de calabacín y zanahoria son el resultado de una receta que probé y me gustó mucho. A pesar de lo rara que pueda parecer la mezcla, quedaron muy ricos. Dorados y tiernos por fuera y esponjosos pero también jugositos en su interior. 


*INGREDIENTES:
- 10 claras de huevo.
- 150 gr. de harina de avena (vale copos molidos o la que tengas)
- 450 gr. de calabacín rallado. (Aproximadamente 1 grandote)
- 350 gr. de zanahoria rallada. (Aproximadamente 3 pequeñas)
- 1 cucharadita de aroma de vainilla (opcional)
- Canela al gusto.
- 1/2 sobre de levadura en polvo.
- 15 gr. de sirope de ágave (unas 3 cucharadas) o el endulzante que uses.
- Un puñado de pasas (opcional)
- Unas nueces picadas (opcional)

* ELABORACIÓN:
Comenzamos encendiendo el horno a 180-200° . Rallamos el calabacín y le escurrimos bien el líquido que va a soltar para que no nos humedezca en exceso la masa. Presionando en un colador o a mano. Rallamos las zanahorias y mezclamos con el calabacín. Incorporamos las claras mientras vamos mezclando con una cuchara, luego la harina mezclada con la levadura, la canela, vainilla y finalmente agregamos las pasas y nueces picadas. Repartimos, mezclamos bien y vamos a rellenar los moldes de muffins o magdalenas 3/4 de su capacidad. Horneamos a 180°-200° hasta que cuajen, crezcan y adquieran un tono dorado nuestros muffins.



Apagamos el horno y dejamos reposar la bandeja con los muffins dentro con la puerta cerrada unos minutos para evitar el contraste de temperatura y así no se nos bajen mucho el copete que se forma. Luego abrimos la puerta del horno y los dejamos unos 10-15 minutos con la puerta abierta. Por último yo los saco del molde y coloco sobre una rejilla para que enfríen por completo.


Sustituye las pasas y nueces por trocitos de chocolate negro sin azúcar o cualquier otro fruto seco. Utiliza ralladura de limón o naranja si quieres darle un toque cítrico. 


Espero que se animen a probar esta receta y les sorprenda en casa, para bien, tanto como a mí.

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